El sistema turbidítico de Ondarroa constituye un sistema siliciclástico confinado con forma de L, depositado
en una subcuenca marina profunda de tipo pull-apart. El estudio de nuevos afloramientos correspondientes
al sistema externo ha permitido caracterizar dos sistemas de dispersión coetáneos perpendiculares. Un
sistema de dispersión axial de dirección ESE correspondiente a las corrientes turbidíticas siliciclásticas, y
otro sistema de dispersión transversal de dirección NNE representado por potentes slumps lutíticos de
talud. El confinamiento de las corrientes turbidíticas axiales y el desarrollo de depósitos de talud habrían
estado causados por la actuación sinsedimentaria de la falla de Elgoibar, paralela a los flujos axiales