La televisión está sufriendo grandes cambios con la llegada de la tecnología digital, la multiplicación de las formas de
distribución, la asociación del producto televisivo de entretenimiento a otro tipo de servicios, la nueva forma de relación con las
audiencias. Todo ello marca un planteamiento distinto de lo que es televisión y su política de programación, qué contenidos se
ofertan, por cuáles está dispuesto a pagar la audiencia.
Para hacer un análisis en profundidad del tema tendríamos que partir de los aspectos empresariales y de rentabilidad que son
al fin y al cabo los que determinan las tendencias del mercado, basados evidentemente en las posibilidades que brinda la tecnología y
a partir de ahí analizar las cuestiones comunicativas, de programación y relativas a públicos y usuarios.
Cabe por tanto destacar las siguientes cuestiones:
La convergencia multimedia y su influencia en la televisión, se marcan pautas de desarrollo y acción. Televisión, telefonía y
transmisión de datos se reparten el negocio de las telecomunicaciones. ¿Quién se lleva el gato al agua?, ¿qué papel tiene la televisión
en la oferta global que los operadores están ofreciendo al cliente? Esto es importante para adelantar lo que se invertirá en ella y cómo
pueden cambiar los contenidos. ¿Qué ha ocurrido y está ocurriendo en otros países? En muchos casos la oferta de televisión es una
cuestión clave porque engancha al cliente, pero no es la clave del negocio, a veces ha resultado incluso la parte de la oferta que
resulta deficitaria, pero una baza fundamental como aliciente que se rentabiliza con telefonía y otros servicios.
¿Cuáles son las Infraestructuras de distribución a través de las cuales se puede acceder a la televisión y cuál es la situación de
cada una de ellas? Si el satélite fue el primero en nuestro país en dar a conocer la televisión digital sin duda tiene limitadas
posibilidades interactivas que lo limitan. La televisión por cable, caracterizada por la lentitud en su entrada, se muestra puntera en
opciones alternativas de negocio, en interactividad, en margen de participación de las audiencias y todo ello hace que tenga mucho
que decir en los próximos años; la TDT se ha asociado a la necesidad de dar a conocer a todos qué es la televisión digital más allá de
la mera multiplicación de canales, para muchos este papel tiene fecha de caducidad y si el retraso persiste sus características
tecnológicas pueden limitarla mucho. La televisión a través de ADSL es el último lanzamiento de telefónica que tras desmarcarse del
negocio del cable apuesta por esta opción tecnológica de menor coste.
¿A través de qué terminales podremos ver televisión?, ¿la pantalla clásica del televisor, el ordenador, móviles de tercera
generación…?, ¿cuál es el terminal del futuro?, ¿cómo influye el formato de la pantalla en los contenidos?, ¿cuáles serán esos nuevos
contenidos adaptados?
El negocio de este siglo es sin duda el de los contenidos, han avanzado tantos los espacios tecnológicos que la falta de
contenidos y servicios adaptados para poder llenarlos se ha hecho patente en los nuevos tiempos digitales. ¿Cambiará esto la filosofía
de programación de la televisión?, ¿va a desaparecer la televisión generalista?, ¿qué ocurrirá con el concepto de «televisión basura»?
La Interactividad marca una relación diferente con el espectador que cada vez más se asemeja a la relación con el usuario de
Internet. ¿Ya no es pasiva la televisión?, ¿quién tiene el «mando» de la nueva televisión?
Mil nuevos caminos aportan al panorama audiovisual nuevas perspectivas. Pero, en definitiva, ¿la televisión digital es una
televisión de más calidad?, ¿se exigirá más a aquella televisión que tengamos que pagar? A corto plazo el balance no es
excesivamente optimista, no se observa una ampliación notoria de los contenidos de calidad, al menos no todo lo esperado. Pero
probablemente el problema es que no han evolucionado todos los sectores al mismo ritmo, se necesita tiempo para generar
contenidos y no hay duda de que se han abierto grandes posibilidades de crecimiento para contenidos culturales, minoritarios, que en
la televisión de masas era impensable. La nueva televisión digital tiene un sentido diferente, personalizado, individualista que ya en sí
va a marcar una forma distinta de hacer televisión y ver televisión
The digital television brings a new form to make and to watch, the question is if they are going to change the contents, they
will be of greater quality.there is place for cultural and educative contents. In order to analyze the subject it is necessary to study the
different forms from distribution and the options of reception, ¿onde is the keys of the business?