“Algoritmo” es un desconocido término tecnológico que se ha puesto de moda. Existe un fenómeno de
sugestión generalizada y ofuscada respecto de la fascinación tecnológica incitada por una publicidad y propaganda
intensiva.
Para entender el fenómeno examinaremos algunos de los tipos de algoritmos más comunes, sus reglas y el concepto de
eficiencia. La computación, el Big Data y los algoritmos tienen múltiples implicaciones en la vida cotidiana que están
poniendo de manifiesto sus condicionamientos. Por otro lado, debería generarse la alerta de que los “infalibles” algoritmos
fallan y sus perjuicios y consecuencias pueden llegar a ser irreparables. Ante esta situación, la crítica silenciada, está
comenzando a proclamar que “Internet no es la respuesta”, que conforma una siniestra Línea Tenebrosa de
experimentación psicosocial del comportamiento, en un sistema de progresión de vigilancia y control, denunciando el
“nuevo totalitarismo cibernético”, creado en base a un “Lecho de Procusto”.
Se hace patente la indefensión más absoluta, porque los derechos formales declarados, parecen absolutamente inútiles en
la práctica; lo que existe, es una carencia del pleno consentimiento ante esta situación, al carecerse de pleno conocimiento
frente a la imposición, de facto, tanto por parte de grandes corporaciones empresariales como por parte de
administraciones gubernamentales.
Existe un peligro real de control absoluto por parte de los gobiernos y de concentración de la riqueza por las grandes
corporaciones empresariales
“Algorithm” is an unknown technological term that has become fashionable. There is a phenomenon of
obfuscated widespread suggestion regarding the technological fascination prompted by intensive comercial publicity and
propaganda.
To try to understand the phenomenon we will study some of the most common kinds of algorithms, their rules and the
concept of efficiency. Computing, Big Data and algorithms have multiple implications in everyday life that are showing their
conditioning.
On the other side, an alert should be generated that the “infallible” algorithms fail and their damages and consequences
can become irreparable. In this situation, silenced criticism is beginning to proclaim that “The Internet Is Not the Answer”,
which forms a “Creepy Line” of psychosocial behavioral experimentation, in a surveillance and control progression system,
denouncing “the new cyber totalitarianism”, created based on a “Procrustean Bed”.
The most absolute defenselessness is evident, because the formal rights declared, they seem definitely useless in practice;
there is a lack of full consent on this situation for lacking full knowledge in opposite to de facto imposition by the big
corporations as by government administrations, on both of them.
Exists a real danger of governments´s absolute control and the wealth concentration in a big corporations