Debatir en contextos globales de movilidad, interconexión, migraciones y comunidades diversas, el tema
identitario de algunos de los colectivos que las conforman tiene que ver con los procesos de inclusión o exclusión en los
que se hayan insertos los grupos poblacionales minoritarios.
Si las relaciones de comunicación y poder que se establecen entre los diversos miembros de una sociedad no son
equitativas o medianamente equilibradas, los grupos excluidos deberán encontrar en la reivindicación de su identidad
colectiva las preguntas y las respuestas a su situación de desventaja, se recurrirá entonces a la etnia, a las prácticas
culturales, a la religión o al común origen. En esencia las reivindicaciones identitarias son una respuesta y consecuencia
de los procesos estructurales de exclusión e injusticia social que niega o limita de manera sistemática a ciertos grupos
poblacionales sus derechos y por consiguiente el disfrute y goce de los recursos y bienes comunes.
Abordar los procesos identitarios que vive la población afroafricana y afrodescendiente, tiene que ver hoy como ayer, con
la discriminación estructural que las personas de piel negra sufren dentro y fuera del continente africano como producto
de la etnocolonización europea, y con los necesarios procesos reivindicativos que se siguen tejiendo desde los barrios, los
foros sociales o la academia inquieta y comprometida en América o en África. Este artículo constituye un posicionamiento
frente a dos grandes corrientes identitarias “negros” o “afrodescendientes”, como parte del resultado de un estudio
realizado en un contexto de migraciones negro-africanas al sur de España
Debating in global contexts of mobility, interconnection, migrations and diverse communities, the identity
issue of some of the groups that make up them has to do with the processes of inclusion or exclusion in which minority
population groups have been included.
If the relations of communication and power that are established between the various members of a society are not
equitable or fairly balanced, the excluded groups will have to find in the claim to their collective identity the questions and
answers to their disadvantaged situation, then recourse will be had to ethnicity, cultural practices, religion or common
origin. In essence, identity claims are a response and consequence of the structural processes of social exclusion and
injustice that systematically deny or limit certain population groups their rights and, consequently, the enjoyment and
enjoyment of common resources and goods.
Addressing the identity processes experienced by the Afro-African and Afro-descendant population today, as yesterday,
has to do with the structural discrimination that people with black skin suffer inside and outside the African continent as
a result of European ethnocolonisation, and with the necessary vindictive processes that continue to be woven from the
neighbourhoods, social forums or academia that are restless and committed in America or Africa. This article is a position
on two major "black" or "Afro-descendant" identity movements, as part of a study carried out in the context of black-African
migrations to southern Spain