Entre el extraordinario legado de tradiciones sociales y culturales del Parque Nacional
de Doñana (Suroeste de Andalucía) sobresale la cría de caballos marismeños
asilvestrados, no sólo por su importancia como práctica ganadera ancestral, viva e insólita,
sorprendentemente poco conocida y apenas estudiada, sino también porque constituye
un ejemplo eminente de las contribuciones de la cultura andaluza al resto del
mundo. La ganadería marismeña es, sin duda, la matriz cultural de las tradiciones ganaderas
de América. En este artículo se aborda su análisis dentro de un marco comparativo
internacional del que se deduce que lo que verdaderamente distingue la cría de los
caballos marismeños de otros casos paralelos en el mundo es haberse convertido en un
elemento central de la cultura local, mediante emotivos procesos sociales de construcción
y mantenimiento de la identidad comunitaria, en medio de reiterados conflictos con
las autoridades oficiales del Parque.