El caso que se presenta en este artículo es de una gestante a
término que acuerda con su matrona una atención de baja
intervención en su parto, apareciendo en éste una seria
complicación: presencia de líquido meconial espeso. El parto
termina con una aspiración meconial severa del recién nacido,
situación muy grave que requiere el ingreso en una Unidad de
Cuidados Intensivos Neonatales y que genera en la familia la
aparición de un proceso de duelo. Esta revisión del caso
pretende evaluar la asistencia prestada durante el proceso de
parto así como la tarea del personal de enfermería para
facilitar el duelo. La intervención enfermera consigue una alta
satisfacción de la usuaria y su familia con el proceso de parto,
y favorece la elaboración de un duelo funcional.