El macizo cuarzo-feldespático que aflora en el curso alto del río
Freser (Pirineos Orientales) ha sido objeto de numerosas interpretaciones
que incluyen desde su consideración como un zócalo gneísico
precámbrico, una intrusión ordovícica gneisificada durante la Orogenia
Herciniana o incluso una intrusión granítica herciniana. Unas
recientes dataciones de U-Pb en circones proporcionan una edad
claramente ordovícica de unos 457 Ma para todos los protolitos de
las rocas quarzo-feldespáticas, las cuales son consideradas genéricamente
como ortogneises. Sin embargo el hallazgo de evidentes
contactos intrusivos que seccionan las estucturas hercinianas y se
ramifican como apófisis centimétricas a métricas en los esquistos
corneanificados parece contradecir esta edad. En el nuevo contacto
intrusivo de la Jaça Roja que se describe, el granito presenta una
deformación muy poco significativa y corta la foliación de los esquistos
en ángulos diversos originando xenolitos. La observación de este
afloramiento plantea una contradicción: si la datación es correcta
la foliación de los esquistos debería ser ordovícica o anterior. Si los
esquistos son hercinianos, la intrusión debería ser tardiherciniana o
posterior
The quartz-feldspathic massif that crops out in the upper Freser
River (Eastern Pyrenees) has been the object of numerous interpretations
that include from its consideration as a Precambrian
gneissic basement, a gneissified Ordovician intrusion during the
Hercynian Orogeny or even a hercynian granitic intrusion. Recent
U-Pb dating in zircons provides a clearly Ordovician age of
about 457 Ma for all protoliths of quarzo-feldspathic rocks, which
are generically considered as ortogneises. However, the finding of
obvious intrusive contacts that cut the Hercynian structures and
form centimetric to metric apophyses into the hornfelsed schists
seems to contradict this age. In the new intrusive contact of the
Jaça Roja that is described, the granite presents a very insignificant
deformation and cuts the foliation of the schists at different angles,
originating xenoliths. The observation of this outcrop poses a contradiction:
if the dating is correct, the foliation of the schists should
be Ordovician or earlier. If the schists are Hercynian, the intrusion
should be late-hercinian or even later