Mientras Peirce reconoce lapresencia activamente referencial del «objeto» absoluto
como límite semiótico, Eco (1988) propone erradicar el problema del referente,
cuya incursión en la teoría de los códigos degenera en la «falacia extensional». Dada
la insoslayable apelación de la figura a su significado, la autora plantea que la problemática
de la significación artística no podría resolverse apartando el horizonte del
sentido, en tanto que éste no sólo justifica elffincionamiento de la forma significante:
también determina su naturaleza semiótica.
La originaria vinculación del significante mentalfigurativo respecto a su significado
no le convierte en instrumento rígido e inadecuado para el juego combinatorio
del pensamiento. Al contrario: su invocación insistente al sentido arraiga en la figura
-yen el icono- como enclave de transgresiones al mecanicismo de los lenguajes culturales
en que indefectiblemente ingresa.
While Peirce admits the presente activelyreferential of the absolute objectaso semiotics
limit, Eco (l988)proposes to eradicate theproblem of the referent, whose incursion in
the theoty of codes degenerates into the «extensivefallacy».Due to the undeniable calI of
the figure on its significance, the author proposes that the artistic sign<ficance would be
unable to resolve itselfifone keepsapart the horizon of ¡he sense, as this onedoes not only
jusufie ¡he fi¿nctioning of ¡he sign<ficantform, but also establishes its nature.
The original link of ¡he mental representational significance with regard ¡o its signification
does no¡ ¡ransform it in a rigid and inappmpiate instrumentfor ¡he combina-
¡ory play of thought on the contrary. Us insistent invocation ¡o ¡he sense strengthens in
thefigure —an ¡he icon— as an enclave of the transgressions to the mechanims of the
cultural languages in which it enters unfailingly